Los riffs de hormigón, el ritmo acerado, las gafas de sol negras y las barbas largas: son las cuatro señas distintivas del legendario trío formado en Houston (EE.UU.) por Billy Gibbons, Frank Beard y Dusty Hill. Cincuenta millones de discos vendidos y un sello absolutamente reconocible les acreditan.
De esos cincuenta millones (en más de cincuenta años) de discos despachados, una quinta parte se los lleva “Eliminator” (1983), el más icónico de los quince álbumes publicados (de estudio, porque cuentan con siete recopiñatorios, cuatro directos y 38 singles) por esta veteranísima formación que ha sublimado como nadie una rocosa combinación de boogie rock, hard rock y rock sureño, a lo largo de una carrera en la que han contado con colaboradores puntuales como John Fogerty, Dwight Yoakam, Rick Rubin o Billy Bob Thornton. El trío solo vio alterada su formación a consecuencia del fallecimiento del bajista Dusty Hill en 2021, reemplazado desde entonces por Elwood Francis, demostrando que su marca es cien por cien perdurable y está por encima de casi todo.