Hay que tener muy pocos prejuicios y una imaginación desbordante para siquiera acercarse a lo que hacen los sevillanos Califato ¾ y los suecos Viagra Boys. Los primeros, retorciendo la tradición musical andaluza desde la modernidad de la electrónica. Los segundos, dotando al post punk de ironía, acidez y un humor muy negro.
Viagra Boys no participan del edulcorado mimetismo con el que algunos de sus paisanos interpretan los preceptos del punk. En absoluto. Todo en la propuesta de este quinteto de Estocolmo es acidez, sátira, retranca y conciencia política. Lo han hecho patente en cinco álbumes desde 2015: el más reciente es “viagr aboys” (2025), que ya desde su mismo título muestra su intención de subvertir esquemas.
Califato ¾ han creado un lenguaje prácticamente nuevo. Tal cual. Han combinado la tradición musical andaluza con la electrónica, el punk y el rock, y lo han hecho con una irreverencia que al mismo tiempo es respetuosa porque sabe que el mejor homenaje que se le puede hacer a su legado es pervertirlo. Se aprecia ya desde los títulos de sus discos: “L’ambôccá” (2018), “Puerta de la Cânne” (2019), “La Contraçeña” (2021) y “Êcclabô de Libertá” (2024). Ellos lo definen como “folclore futurista”, pero lo mejor es verlos en directo para convencerse el poder telúrico de una propuesta audaz y con fundamento.