No hay festival que se precie que no haya contado o no haya tratado de contar en la última década con este trío norirlandés, experto en componer estribillos jubilosos y bailables.
Las melodías euforizantes y los adictivos riffs de guitarra de este trío norirlandés tienen una presencia constante en los escenarios de medio mundo desde que debutaran con aquel formidable álbum, Tourist History (2010), que los sitúo en el mapa del mejor pop independiente internacional. ¿Quién no ha bailado alguna vez “What You Know”, “Undercover Martyn”, “Something Good Can Work” o “Cigarettes In The Theatre”, todos extraídos de aquel rutilante comienzo de carrera? Alex Trimble, Sam Halliday y Kevin Baird llevan desde entonces engrosando los carteles de festivales como Glastonbury, Reading, Leeds o Coachella y aumentando exponencialmente los niveles de serotonina del público gracias a una propuesta que funde la mejor tradición del pop indie con los ritmos de la música de baile, en un combinado infalible que han ido destilando con maestría a lo largo de discos como Beacon (2012), Gameshow (2016), False Alarm (2019) o Keep On Smiling (2022). Con ellos, han prolongado a su manera la saga de ilustres bandas norirlandesas que les han precedido, desde los tiempos de Stiff Little Fingers o Undertones hasta Snowpatrol, pasando por Ash o The Divine Comedy.