Ambos nacieron en EE.UU., pero lucen con orgullo su condición de extraordinarios embajadores de la mejor música popular latinoamericana. Son la mexicana Julieta Venegas y el argentino Kevin Johansen, dos músicos que han hecho arte de la transversalidad de dos propuestas musicales tremendamente versátiles. Imprescindibles.
La cantante, compositora, productora y actriz mexicanoestadounidense Julieta Venegas es uno de los grandes nombres de la música latina de las últimas dos décadas. Ha vendido más de doce millones de discos en todo el mundo, ha obtenido infinidad de Grammy latinos, unos cuantos Grammy generalistas y varios premios MTV, entre otros muchos reconocimientos, y ha colaborado con Tainy, Bad Bunny, Sen Senra, Dom La Nena o No Te Va a Gustar, entre muchos otros. Pero más allá de las frías cifras, lo sustancial es la forma en la que canciones como “Lo siento”, “Limón y sal”, “Me voy” o “Andar conmigo” han anidado en la memoria colectiva de millones de personas a ambos lados del Atlántico. Su último trabajo, “Tu historia” (2022), el octavo de su carrera, es otra espléndida muestra de su habilidad para lograr que el pop, el folk y el synth pop se diluyan en un único estilo, porque ella es un género en sí mismo.
El ingenio y el sentido del humor siempre han sido dos de las divisas de Kevin Johansen, quien ya se alió en su momento con el grupo humorístico Les Luthiers y desde hace más de quince años rueda un espectáculo junto al emblemático ilustrador Liniers, durante el que este va dibujando en directo, de forma improvisada, mientras el músico argentino estadounidense va desgranando lo mejor de su discografía junto a su banda habitual, The Nada. Lo que comenzó en 2008 como un divertimento, pasó luego por multitud de escenarios de Europa y América, aunque hacía ya siete años ya que no retomaban el espectáculo. Se trata, al fin y al cabo, de una singular combinación de música, arte, humor y baile, en un show diferente, repleto de grandes canciones que forman parte del mejor imaginario del pop rock en castellano.
