Mitski podría jugar ahora mismo en la misma liga que Lana Del Rey. Puede sonar exagerado, pero basta escuchar su séptimo disco, el brillante “The Land Is Inhospitable And So We Are” (2023), para aseverarlo. Su visita a Noches del Botánico promete momentos imborrables.
La elegante templanza de la música de la estadounidense – de ascendencia japonesa – Mitski Miyawaki es fruto de una educación casi nómada: vivió en Turquía, China, Malasia y la República Democrática del Congo, hasta establecerse en Nueva York, y seguramente por eso sus canciones se han ido nutriendo, a lo largo de una carrera de más de una década y siete álbumes, del pop electrónico, el folk, el country y el indie pop confesional. Sin ataduras. Con la misma soltura para telonear a Pixies que a Lorde. Su séptimo álbum, el brillante “The Land Is Inhospitable And So We Are” (2023), incluido en numerosas listas de lo mejor del año pasado para los medios especializados, se decanta por la faceta más suntuosa y reflexiva de su propuesta. Mitski estuvo a punto de abandonar el mundo de la música hace tres años, agobiada por los estragos de la fama, pero reconsideró su impulsiva decisión y el mundo lo puede y lo debe celebrar.